De las dificultades de la traducción inglés-castellano: El pronombre «you»
(Publicada en el blog de JCruz Servicios Lingüísticos el 05-06-2020)
Si una virtud tiene el inglés es la de ser un idioma «económico». Pero lo es tanto que, en el caso del pronombre personal de segunda persona, una misma forma, you, abarca las seis formas distintas que adopta en castellano y no distingue siquiera entre singular y plural. (Y sólo incluyo aquí los pronombres de sujeto; aparte, están los de complemento directo e indirecto, que nos darían varias formas más: te, ti, os, le, lo, la, les, los y las).
Esto crea serias dificultades al traducir un texto narrativo, pues tendremos que decidir qué formas utilizar en los diálogos: singular o plural, y tratamiento formal (usted/ustedes) o informal (tú/vosotr@s).
La elección entre singular o plural suele venir dada por el contexto, aunque a veces incluso en inglés se ha de especificar cuando es plural, mediante fórmulas como you all o you guys (masculino genérico y, por tanto, problemático). Más difícil resulta determinar si el trato ha de ser formal o informal.
🟣 En realidad, esto también puede afectar a la traducción desde otras lenguas en las que sí existen pronombres distintos para el trato formal e informal pero en los que su uso varía con respecto a lo que por el momento llamaré, aun siendo consciente de que no existe tal cosa, castellano estándar. Por ejemplo, en francés es mucho más frecuente el trato formal de vous, mientras que en las lenguas escandinavas predomina el trato informal. En estos casos lo que hay que decidir es si se hace una traducción literal o bien se adapta al uso más extendido en el mundo hispanohablante (eso que llamé castellano estándar). Personalmente, soy partidaria de lo primero, explicando, cuando resulte pertinente, la diferencia de uso. Esto hace, por ejemplo, Carmen Montes, la traductora de la serie Wallander de Henning Mankell: la primera vez que aparece un diálogo en que el tuteo podría chocar explica en una nota al pie que en sueco es común el tuteo incluso entre personas de las que se espera el ustedeo, como un policía en un interrogatorio o entrevista (personalmente, no me gusta demasiado que me traten de usted, pero si de alguien lo espero, es de la policía).🟣
Aquí me voy a centrar en el inglés, puesto que es inevitable tomar esa decisión, salvo en novelas en las que, por incluir sólo interacciones de tipo horizontal (amistades, familia, parejas, colegas de trabajo), resulte lógico usar siempre el tuteo.
🌐 Antes, un pequeño inciso. No existe eso que llamé castellano estándar en ningún sentido, y por supuesto tampoco en el uso de tú/usted. Simplificando un poco (no soy dialectóloga): hay países en los que suele utilizarse siempre el usted, tanto para el trato formal como informal (Colombia y los países centroamericanos), y otros en los que se utiliza el vos para el trato informal (Río de la Plata y algunas zonas de Centroamérica). Por otra parte, incluso cuando existe la distinción tú/usted, hay países en los que predomina más el trato formal que el informal, y viceversa. Una traductora debe ajustarse al uso común en el país en el que vaya a comercializarse la novela y, si pretende comercializarse en todo el ámbito hispanohablante, deberá elegir el uso más extendido: el tú informal y el usted formal, sin exagerar ni uno ni otro.
Lo mismo vale para el plural. Si la novela pretende comercializarse en España, lo lógico es traducirlo por vosotros/vosotras, pues es la forma utilizada por el 90% de la población española (están excluidas Canarias y algunas zonas de Andalucía). En cambio, si está destinada a todo ámbito hispanohablante, debería optarse por ustedes, que es la forma utilizada por el 90% de esa población. 🌐
🌐🌐 Y otro inciso: no soy partidaria de buscar un inexistente castellano neutro al traducir. Me parece razonable en el caso de tú/usted, pero, más allá de eso, en lo que se refiere a vocabulario, coloquialismos, etc., creo que la traductora debe utilizar el «dialecto» en el que se sienta más cómoda.) 🌐🌐
Volviendo al tú/usted: El inglés nos da algunas pistas. Si un personaje se dirige a otro utilizando el apellido precedido por un título (Mr., Ms., Doctor o Professor), la única opción lógica es usted. En castellano no tendría sentido decir: “Señora García, ¿cómo te sientes hoy?”. En cambio, lo contrario sí es relativamente común: “María, ¿cómo se siente hoy?”. Por tanto, es preciso determinar en cada caso qué tipo de tratamiento resulta más adecuado.
🔷 Para ello, deben tomarse en cuenta varios factores:
- Si se trata de una relación jerárquica, en términos laborales o de clase: En este caso es probable (aunque no forzoso) que la persona “subordinada” se dirija a la otra utilizando usted, pero no viceversa. (Existe también un usted despectivo, pero este matiz no tiene cabida a la hora de traducir del inglés.)
- Las características del personaje: Si es muy envarado y/o anticuado, tenderá más al ustedeo, tanto a utilizarlo como a exigirlo.
- La edad: La gente joven es más proclive al tuteo, salvo quizá con las personas muy mayores.
- La época en la que se desarrolla la novela: Si no se trata de una novela contemporánea (pero tampoco tan antigua como para exigir otros tipos de tratamiento, como vuesa merced), predominará más el ustedeo.
- La situación: En situaciones de intimidad o violencia es más probable el tuteo.
Voy a ilustrar el proceso con la novela Nunca claudiques, de Seb Kirby, que tuve el placer de traducir en 2016. Se trata de un (estupendo) thriller protagonizado por un productor de radio londinense de 31 años, Jim Blake, que encuentra a su pareja, Julia, asesinada en su casa y se convierte en el principal sospechoso de su muerte. Huye entonces a Florencia, donde Julia estaba trabajando como restauradora de arte, para intentar esclarecer el crimen. En la novela se alternan capítulos situados en el presente, narrados en primera persona por el protagonista, y capítulos situados en los días previos al asesinato, narrados en tercera persona por un narrador omnisciente.
En la novela hay varias relaciones horizontales en las que el tuteo es incuestionable: por ejemplo, entre Jim y su hermano Miles, o entre Julia y sus compañeras de trabajo. También me pareció lógico elegir el tuteo entre Jim y dos colegas de Julia, y con Sergio, un colega de su hermano, aunque recién acaben de conocerse.
Pero hay también hay varias relaciones jerárquicas:
- Entre Jim y la policía británica e italiana: En este caso, opté siempre por el usted. Jim, en tanto sospechoso, utilizaría un tratamiento de “respeto” hacia quienes lo investigan, y tanto el inspector británico (Hendricks) como el italiano (Manieri) parecen lo suficientemente «formales» como para hacer lo mismo.
- Entre Jim y el jefe de Julia, Clinton Ridley: Aunque éste insiste en que se le llame por el nombre de pila, lo que constituye una invitación implícita al tuteo, el carácter arrogante del personaje no se presta a ello.
- Entre Jim o Julia (en distintos momentos de la trama) y la familia mafiosa Lando (el padre, Alfieri, la madre, Alessa, y el hijo, Matteo): En estos casos, lo que intenté fue ponerme en la piel de los personajes. Por ejemplo, Alessa le insiste a Julia en que la llame por el nombre de pila, pero aun así no la (o me) veía tuteando a esta señora poderosa ―y peligrosa― a quien está pidiendo una especie de favor profesional. En cuanto a Jim, me pareció lógico, por ejemplo, que tutease a Matteo, ya que, pese a ser el hijo del “jefe de todo esto”, es más joven que él y un tipo bastante pusilánime.
- Entre la familia Lando y el personal a su servicio, especialmente Zella: Asumí de entrada que una familia como l@s Lando tutearía a su personal y éste, por su parte, utilizaría el usted. En el caso de Zella, sin embargo, me pareció razonable que, si bien trata de usted a Alfieri (es evidente que le tiene miedo), tutee a Alessa y a Matteo, pues mantiene una relación de confianza con la primera y una relación cuasi “maternal” con el segundo.
En mitad de la novela hice dos cambios de tratamiento, sin que estuviesen señalizados de ningún modo en el original. En determinado momento, Jim le da una paliza a alguien (no diré el nombre para no “destripar” la trama) a quien hasta entonces trataba de usted y me pareció lógico que cambiase al tuteo. Como que no me sonaba bien la amenaza: “Dígamelo […] o le juro por Dios que lo mato”. Opté, pues, por: «Dímelo […] o te juro por Dios que te mato». El otro caso fue una conversación entre Jim y una de las personas (de nuevo, hasta aquí puedo escribir) bajo el mando de la familia Lando, cuando se pone en contacto con ella para urdir un plan contra la familia, lo que crea una complicidad que propicia el tuteo.
Estas cuestiones las comenté con el autor, pero no habla castellano, con lo cual no tenía una experiencia personal, ni siquiera vaga, del uso de tú/usted, pero estuvo de acuerdo con las decisiones que tomé tal como se las expliqué. Eso sí: me recalcó que la cultura británica tiende a ser muy “formal” y esto también lo tomé en cuenta.
🌐 Y un último inciso: Técnicamente, esta novela plantearía una capa más de decisiones, puesto que en italiano sí existe una diferencia entre tú (tu) y usted (Lei), y en todas las escenas que se desarrollan en Italia el tratamiento (formal) habitual entre los personajes es “Signor” o “Signora”. Sin embargo, como los diálogos están en inglés, incluso cuando se supone que los personajes hablan en italiano, hice caso omiso de esa posible interferencia. 🌐
Espero que tú/vos/usted, lector o lectora, haya/s disfrutado y/o aprendido algo nuevo con esta entrada.😊😊
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